El presidente de Fedecámaras Nueva Esparta, Andrés Rodríguez Ghersi, estima que en la entidad alrededor del 70% del plantel de las empresas existentes se encuentran afectadas por la recesión económica.
Reconoció que el empresariado local hace grandes esfuerzos por sobrevivir a la pronunciada crisis económica que los ha obligado a optar por el cambio de ramo e, incluso, por la reducción de sus establecimientos para no tener que cerrar definitivamente sus negocios.
Una de las opciones más recurrente entre los empresarios, según explicó, es migrar hacia la importación de alimentos y víveres, por lo que es común ver locales que se venían dedicando a la venta de electrodomésticos o de telefonía celular, exhibiendo esos productos.
Lamentó que el gobierno siga dando prioridad a la importación de ciertos rubros alimenticios, pero le niega la posibilidad a los productores nacionales de cooperar en la solución de la marcada escasez de esos productos a nivel de todo el territorio nacional.
Rodríguez Ghersi considera que se trata de una solución temporal a la escasez pero que no satisface al grueso de la población, ya que los precios dolarizados no acercan esos productos al común de los neoespartanos.
“Los trabajadores que ganan salario mínimo no tienen las posibilidades de tener acceso a todos esos productos, ya que los mismos son vendidos a precios en dólares, mientras ellos devengan sus salarios en bolívares”, acotó Rodríguez Ghersi.
Para el vocero empresarial la situación ha llegado al punto que la gente destina sus recursos a comprar alimentos, víveres y artículos de limpieza, en tanto que la venta de ropa y calzados ha disminuido considerablemente.
Convenio cambiario poco claro
En relación con el anuncio gubernamental de poner en vigor el Convenio Cambiario N° 36 en zonas libres de impuestos, como por ejemplo el Puerto Libre de la Isla, dijo que esa figura sigue teniendo poca claridad para los comerciantes y prestadores de servicios turísticos.
Subrayó que la aplicación del mismo no es práctica ni funcional para creer que se están haciendo transacciones con esa moneda extranjera, porque la modalidad no le resulta a los empresarios sino al gobierno que es quien recibe los dólares baratos.
“No hay reglamento preciso y los empresarios no saben cómo van a operar, ni los bancos tampoco están claros de las operaciones. Ni siquiera tienen claridad en los trámites para retornar esos dólares al Banco Central”, expresó el presidente de Fedecámaras.
Fuente: El Sol de Margarita